20:21 La intervención fue en la azotea de un hospital y los doctores tuvieron que vestirse con un traje especial contra explosivos
Bogotá (EFE).- Un grupo de médicos del Hospital Militar de Bogotá logró extraer una granada que se incrustó de forma accidental en la pierna de un soldado de 18 años, quien permaneció cuatro horas con el explosivo en su cuerpo sin estallar, informaron los directivos del centro asistencial de la capital colombiana.
El médico Ricardo Uribe, director de Urgencias del hospital, declaró a los periodistas que pudo retirarle el explosivo al soldado Alexander Guerrero, que horas antes resultó herido al dispararse un fusil de un compañero durante una práctica militar en Sopó, a 30 kilómetros de Bogotá.
El soldado fue trasladado en una ambulancia a un centro médico de la localidad de Cajicá, pero ante la gravedad de la herida Guerrero fue trasladado al Hospital Militar de Bogotá.
La intervención fue practicada en la azotea del hospital y el facultativo tuvo que vestirse con un traje especial contra explosivos y fue acompañado por artificieros.
Uribe indicó que una vez retirada la granada, procedimiento que duró unos quince minutos, se la entregaron a expertos que la detonaron de forma controlada en otro lugar.
"La granada no explotó porque ha sido diseñada para que se active una vez recorra determinada distancia. Al parecer, el disparo fue muy cercano a la pierna del soldado, de tal manera que no hubo el suficiente recorrido para que estallara", explicó el médico Uribe.
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